Seguro que muchos de vosotros habéis rellenado una botella de agua de plástico para poder reutilizarla. Es una acción muy habitual en la zona en la que vivo y, por si no lo sabíais, no es demasiado buena para la salud.
Si os habéis parado a mirar las recomendaciones de los envases de las botellas, nos indican claramente que no debemos rellenarla de nuevo una vez consumida (ver imagen).
Seguramente estéis pensando que se trata de una estrategia comercial… Pues nada más lejos de la realidad.
Las botellas de plástico están elaboradas con algunos materiales que pueden ser perjudiciales, el más conocido es el Bisfenol o (BPA), un producto químico que podemos encontrar en biberones, tazas o vajillas.
Debido a esto, el uso repetido de plásticos fabricados con bisfenol puede causar el desprendimiento de este y la posterior ingesta por nuestra parte.
Se asegura que el bisfenol puede ser un elemento cancerígeno así que hay que andar con cuidado.
Recomendaciones
Una de las cosas más importantes que debemos tener en cuenta es no exponer repetidamente la botella de agua al sol, ya que incrementa el deterioro del plástico y, por lo tanto, la proliferación de los elementos tóxicos.
Usar plásticos libres de BPA: debemos fomentar la creación de productos sin estos químicos dañinos para la salud, en nuestra tienda online tenemos una etiqueta en cada producto que nos indica que ese producto ha sido fabricado sin bisfenol.
Actualmente, se pueden fabricar con HDPE (High Density Polyethylene), un material mucho más seguro.
Cuando compres cualquier utensilio u objeto de plástico acude a una tienda especializada, evitarás problemas y te asesoraremos en cualquier duda que tengas.
No ignores estás indicaciones, no juegues con tu salud por ahorrarte un poco de dinero.